WASHINGTON – El senador John Cornyn (R-TX) escribió el siguiente artículo de opinión en FoxNews.com para destacar su Ley de Transparencia de la Frontera Surque presentó esta semana con más de 20 senadores republicanos. Esta legislación exigiría al Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos que informara con exactitud de cómo está tratando a los migrantes que se encuentran en la frontera y garantizaría que el pueblo estadounidense tenga una contabilidad completa del número de migrantes que están siendo liberados en Estados Unidos.

¿Qué esconde Biden sobre la frontera?

Senador John Cornyn

FoxNews.com

2 de noviembre de 2023

https://www.foxnews.com/opinion/biden-hide-border

La crisis en la frontera sur sigue creciendo. Seguro que ha visto las sombrías estadísticas. Más de 6,2 millones de migrantes han cruzado ilegalmente la frontera sur desde que el Presidente Biden asumió el cargo. Además, al menos 1,5 millones de “fugados” eludieron por completo la acción de la ley. Los centros de detención están por encima de su capacidad, el retraso en los tribunales de inmigración se ha disparado y las expulsiones están en su nivel más bajo en décadas. Cuando visité la frontera sur de Texas la semana pasada, quedó claro que los agentes de la Patrulla Fronteriza están agotados, desanimados y frustrados sin medida. Es fácil ver por qué.

Aunque estos datos ponen de relieve el caos que han creado las fallidas políticas fronterizas del Presidente Biden , sólo cuentan una parte de la historia.

El objetivo de esta administración nunca ha sido solucionar la crisis fronteriza, sino simplemente ocultar las pruebas. Para ello, el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) ha intentado “legalizar” la inmigración ilegal canalizando a los inmigrantes hacia programas de liberación ilegal -o, como se dice en la jerga de la ley de inmigración, “libertad condicional”- creados por él, y no tenemos ni idea de cuántas personas o de qué tipo están entrando en Estados Unidos a través de este boondoggle.

A principios de este año, el gobierno de Biden creó un programa que permite a los inmigrantes de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela entrar y permanecer legalmente en Estados Unidos durante dos años y recibir una autorización de trabajo casi instantánea. El gobierno de Biden dio este gran paso sin el consentimiento del Congreso, actuando unilateralmente para ofrecer estatus laboral a un máximo de 360.000 personas al año.

La administración también amplió un programa destinado a ayudar a ciertos niños vulnerables de El Salvador, Guatemala y Honduras, permitiendo a los padres y familiares de esos niños entrar o permanecer en Estados Unidos.

No existen datos públicos exhaustivos sobre el número de personas inscritas en estos programas, a cuántas de ellas se les renueva el estatuto y si finalmente (o alguna vez) abandonan Estados Unidos.

A una escala aún mayor, estas ventajas no se limitan a personas de países concretos: personas de todo el mundo han sido autorizadas a entrar en Estados Unidos utilizando la aplicación CBP One de la administración. Hasta ahora, la administración ha liberado a más de 266.000 migrantes que programaron citas a través de la aplicación. Esto incluye a individuos de Irán, China, Rusia y otros adversarios de todo el mundo. ¿Están incluidos estos cientos de miles de individuos en el recuento mensual de cruces fronterizos? Simplemente no lo sabemos.

Cuando estos programas no pueden utilizarse para esconder bajo la alfombra los crecientes encuentros fronterizos, el DHS se dedica a la captura y liberación generalizada bajo la simpática etiqueta de “liberación humanitaria”. No está claro quién puede ser capturado y puesto en libertad, qué tipo de control se realiza, cuántos de estos inmigrantes solicitan asilo o hasta qué punto está extendida esta práctica.

Hay mucho que no sabemos, pero una cosa es cierta: el gobierno de Biden ha hecho todo lo posible por maquillar las cuentas y ocultar los niveles récord de inmigración ilegal que ha permitido. Algo debe cambiar, y necesitamos saber qué está haciendo la administración Biden.

Esta semana presentaré la Ley de Transparencia de la Frontera Sur para obligar al gobierno de Biden a hacer públicos estos datos. El pueblo estadounidense tiene derecho a saber cuántos migrantes están siendo liberados en Estados Unidos por esta administración.

Mi proyecto de ley exige al DHS que revele los detalles de sus turbias prácticas de captura y liberación. ¿Cuántos inmigrantes están entrando en el país y de dónde proceden? ¿Cuántos reciben autorización de trabajo? ¿Se van cuando termina su “libertad condicional”? ¿A cuántos se aplica el procedimiento acelerado de expulsión y a cuántos se expulsa realmente? ¿Cuántos solicitan asilo antes de ser liberados en el interior? La administración debe responder a estas preguntas.

Se trata de transparencia. Si el Congreso espera hacer algo significativo para abordar la crisis fronteriza, necesitamos hechos. Necesitamos una contabilidad completa de la crisis fronteriza, no el libro de cuentas manipulado que tenemos hoy.

Hasta ahora, mi proyecto de ley cuenta con más de 20 copatrocinadores republicanos. Se trata de una medida simple y directa que garantizaría que el pueblo estadounidense tenga una imagen exacta de las políticas fronterizas del Presidente Biden.

Si el gobierno de Biden y los demócratas del Congreso creen que estos programas de excarcelación y la forma en que el DHS trata a los inmigrantes detenidos en la frontera son legales, no deberían tener nada que ocultar.